La oposición es muy torpe, por decir lo menos. Ayer escuché a Alito y al líder nacional del PRD atacar a AMLO por no bajar el costo de los combustibles como prometió. Y sí, tienen razón, Obradog juró que acabaría con el Impuesto Especial sobre Productos y Servicios, IEPS, un atraco neoliberal que maldijo decenas de veces en campaña pero que, dos años y medio después del arribo de la 4T al poder, sigue sangrándonos.
La realidad es que deberíamos pagar entre tres y cinco pesos menos por litro de gasolina, pero con el IEPS en perfectas condiciones físicas y mentales estamos por tocar la frontera apocalíptica de los 25 pesos.
No obstante, a pesar de las mentiras flagrantes de AMLO, la molestia de la oposición por los incrementos en los energéticos sigue sin ser replicada por el pueblo bueno y sabio, y eso se debe a la forma en que la alianza plantea sus señalamientos.
No van a lograr nada solicitando a AMLO que reduzca costos o evidenciando sus patrañas por un hecho simple: el mensajero, en este caso el nudo orgiástico PRIANRD-LGBT, mata el mensaje porque fueron esos partidos en los tiempos de Peña Nieto y el pacto por México quienes iniciaron el desastre, sin olvidar los deslizamientos mensuales que Calderón instituyó. ¿Con qué derecho reclaman ahora?
Si los prianistas quieren llegarle al alma al pueblo tienen que cambiar la estrategia, pasar de los reclamos que se anulan a sí mismos a las felicitaciones por la continuidad de los cobros sanguinarios de los gobiernos anteriores, por ejemplo:
“Celebramos que el Señor Presidente de la República, licenciado Andrés Manuel López Obrador, a pesar de las promesas de campaña y del respeto que siembre ha tenido por la palabra empeñada, se ha negado a eliminar el IEPS porque ese impuesto representa 250 mil millones de pesos anuales, dinero del que dependen programas sociales de enorme envergadura como tantas veces declaró el entonces secretario de Hacienda José Antonio Meade. El presidente Obrador ha preferido afrontar el juicio de la historia como mentiroso a dejar desprotegida a la población más vulnerable, decisión sensata y patriótica que lo asemeja a los expresidentes Peña Nieto y Felipe Calderón, que en el mismo trance tomaron la misma determinación.
“Nada importa más que la salud de la Patria y el bienestar de los más pobres, eso va más allá de las siglas, por tanto PRIANRD, Morena, Felipe Calderón, Enrique Peña Nieto, Andrés Manuel López Obrador, estarán eternamente unidos por el IEPS.”
Es probable que AMLO aparezca en La Mañanera diciendo que si bien sigue cobrando el impuesto, el dinero recaudado ahora se ejerce con limpieza porque ya no hay corrupción y blablabla. Pero el palo estará dado: cada carga de gasolina nos recordará que al igual que los otros canallas y a pesar de sus promesas, AMLO sigue enterrándonos cinco pesos por litro por centímetro cuadrado de tripa.
En un tanque de 50 litros, amiguitos, AMLO adquiere las dimensiones del negro del WhatsApp.
Besitos.
Tantán.
Soy aborigen champotonero, licenciado en Ciencias Ocultas y Administración Púbica, adicto a los Pumas de la UNAM y a las tortas de cochinita de Sacha, feliz de haber pasado media vida en reventones, orgías y actividades similares y afligido por haber desperdiciado miserablemente la otra mitad, y dedicado al periodismo para cumplir fielmente la profecía de mi abuelo Buenaventura Villarino, hombre sabio y de fortuna, que más o menos decía así: “Estudia mucho, hijo, o acabarás de periodista”. Besitos. Tantán.
