Ahí donde antes se erguía la estatua a López Portillo, el gobierno del Estado decidió levantar un monumento para celebrar los 150 años del Inicio de la bla bla bla, en cuyo interior depositarán una cápsula con testimonios de este siglo y medio de vida independiente y bla bla bla. La obra, me dicen, fue encargada al honestísimo Arq. Buenfil Burgos y costó 20 millones de pesos, lo mismo que costaría la urgente ampliación de la Av. Gobernadores o el drenaje del fraccionamiento Presidentes de México.
Se trata de una empresa necesarísima para nuestro acervo histórico. Dentro de 50 años, los bisnietos de don Antonio y el Arquitecto podrán ubicar, con total precisión, el momento en que Campeche se emancipó de lo que anteriormente se había emancipado y se transformó en la Hacienda González Curi. Prioridades son prioridades.
Besitos.
Tantán.
Soy aborigen champotonero, licenciado en Ciencias Ocultas y Administración Púbica, adicto a los Pumas de la UNAM y a las tortas de cochinita de Sacha, feliz de haber pasado media vida en reventones, orgías y actividades similares y afligido por haber desperdiciado miserablemente la otra mitad, y dedicado al periodismo para cumplir fielmente la profecía de mi abuelo Buenaventura Villarino, hombre sabio y de fortuna, que más o menos decía así: “Estudia mucho, hijo, o acabarás de periodista”. Besitos. Tantán.