Vacunas desperdiciadas y vacunas cubanas de dudosa calidad para el pueblo mexicano. Dos noticias que ilustran lo que ha sido el desastre del sector Salud con López Obrador, una tragedia hecha de ignorancia, negligencia, irresponsabilidad, terquedad de provinciano iluminado y sonambulismo ideológico.
Ahora bien, ya que todo se resuelve vía consulta (cuando conviene distraer idiotas, claro), pregunto: Tlayuda Majestuosa Primera de Su Nombre, Jinete de Dragones y Comejenes, Azote de Feministas, Seductor de Narcosaurios y Punto G de Gatell, ¿por qué no armamos una consultita sobre qué vacuna queremos, si la cubana o la de Moderna?, y que la voz popular se cumpla porque el pueblo manda, el pueblo pone y el pueblo quita y el pueblo bla bla bla.
Mientras el Supremo decide si nos consulta o nos somete al menjurje cubano, les informo que la vacuna Patria del Conacyt de la 4T, prometida hace casi dos años, sigue en proceso de fabricación. Los trapiches trabajan a su máxima capacidad y se calcula que Patria esté lista cuando arribe la trigésima ola de covid, Un logro del pueblo para el pueblo.
Besitos.
Tantán.
Soy aborigen champotonero, licenciado en Ciencias Ocultas y Administración Púbica, adicto a los Pumas de la UNAM y a las tortas de cochinita de Sacha, feliz de haber pasado media vida en reventones, orgías y actividades similares y afligido por haber desperdiciado miserablemente la otra mitad, y dedicado al periodismo para cumplir fielmente la profecía de mi abuelo Buenaventura Villarino, hombre sabio y de fortuna, que más o menos decía así: “Estudia mucho, hijo, o acabarás de periodista”. Besitos. Tantán.
