¿Recuerdan que al iniciar su mandato AMLO envió una carta al rey español exigiéndole disculpas y perdones por las atrocidades de los conquistadores de hace 500 años? Fue muy emotivo aquello. Algunos seguidores de Obrador hasta juraron por la virgencita de Guadalupe vengarse de los salvajes blancos y barbados que llegaron de la mar océano.
Pues bien, Manuela del Carmen Obrador Narváez es prima de AMLO y en estos días se desempeña como diputada federal por Palenque, cargo por el que piensa reelegirse en las elecciones de julio.
El problema radica en que el distrito 1 al que representa está conformado por “Tila, Sabanilla, Tumbalá, Yajalón, Catazajá, La Libertad y Salto de Agua, tiene un 74.19 por ciento de población indígena, principalmente población mayense chol y tseltal”, y por tanto se encuentra reservado para una candidatura de auto adscripción calificada indígena. Así las cosas, Manuela no sólo usurpa la curul sino que su candidatura es otra vez ilegal porque debería recaer en un indígena y ella no lo es: no pertenece a un pueblo originario, no tiene ascendencia indígena ni habla una “lengua materna”, dice la maestra Crescencia Díaz Vázquez, que participó en el proceso interno de selección de candidatos de Morena y perdió por obra de la misteriosa encuesta que la dirigencia de ese partido usó para poner el dedo sobre los elegidos, deshacerse de morenos incómodos y saludar la llegada de prianistas a sus filas.
La candidatura de la prima de Obrador fue impugnada por Crescencia. El INE la anuló porque Manuela no es indígena. El caso llegó ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, presidido por el magistrado Jorge Luis Vargas Valdez, bajo investigación de la UIF de Santiago Nieto. El Tribunal confirmó hoy a Manuela como candidata a diputada federal. Hasta el momento, el Tribunal no ha publicado el video, la versión estenográfica ni el expediente del caso. Pero sí dio el palazo a Crescencia.
Perdió la maestra indígena una candidatura indígena ante la prima Manuela del presidente Manuel.
Manuela y Manuel, dos ramas de ese árbol frondoso que inició con el abuelo José Obrador, nacido en Ampuero, Cantabria, España; llegado a México en 1917 y casado con Úrsula González, descendiente de asturianos. De ese matrimonio nació Manuela, tía de la diputada y madre de nuestro amado líder y presidente, que ama muchos a los indígenas y en su nombre envió una carta a la corona de ultramar exigiendo una disculpa por los abusos de hace cinco siglos.
Besitotitlanes.
Tantandzaes.
Soy aborigen champotonero, licenciado en Ciencias Ocultas y Administración Púbica, adicto a los Pumas de la UNAM y a las tortas de cochinita de Sacha, feliz de haber pasado media vida en reventones, orgías y actividades similares y afligido por haber desperdiciado miserablemente la otra mitad, y dedicado al periodismo para cumplir fielmente la profecía de mi abuelo Buenaventura Villarino, hombre sabio y de fortuna, que más o menos decía así: “Estudia mucho, hijo, o acabarás de periodista”. Besitos. Tantán.